Su marido le pagó las tetas que otros disfrutan

Hay de los que piensan que nada como invertir en su mujer para disfrutarlo, es decir, que se rompen los cuernos trabajando para operar a su señora y que vaya tuneada de arriba a abajo. Desde luego a la vista es una gozada que tu mujer esté buena cada vez que la ves desnuda y también, dicho sea de paso, les pones los dientes largos a los colegas. Lo malo viene cuando te gastas una pasta en dejarla como un pincel y luego no quiere follar contigo porque se está zumbando a chavales más jóvenes. El exmarido de esta vieja por suerte ya no tiene que gastarse ni un euro en ella, pero con el par de tetas que le puso la cerda se lo come todo.