Un buen trozo de carne para el culo de su madrastra

El culo de esta ama de casa colombiana estaba hambriento y había que darle de comer a toda costa. Por supuesto a ese trasero no le gusta el pescado, lo que le gusta es la carne en grandes cantidades y eso es precisamente lo que tiene su hijastro entre las piernas. Apenas hizo falta un pegotito de vaselina para que directamente le entrase una verga con el grosor de un cubata, pero además hasta los huevos. Dicen que el disfrute del sexo anal tiene un gran componente psicológico y estamos muy de acuerdo, ya que cuando más se relaja una mujer, más fácil es la penetración. Ya nos gustaría a nosotros que nuestro padre se casara de segundas con tremenda milf latina y que además follase por el culo.